Barato, que ha participado en un encuentro de mujeres rurales que se celebra en Toledo organizado por Asaja Mujeres, ha comentado que las medidas que ha aprobado el Consejo de Ministros «van a tener bastante flexibilidad», ya que va a haber un tope hasta 500.000 euros por explotación y van a incluir un aspecto que reclamaba la organización agraria, que el valor de la ayuda estuviera más condicionado al mercado.
«En una palabra, que el mercado manda y el mercado dice cuánto vale una oveja de reposición», ha resumido Barato, que ha añadido con arreglo a este criterio habrá un tope de 500.000 euros por explotación, mediante justificación de la factura del importe de los animales.
A preguntas de los periodistas, el presidente de Asaja ha asegurado que puede confirmar que el Consejo de Ministros ha aprobado esta medida, que habrá que desarrollarla junto con las CCAA afectadas, que son las que las tienen que aplicar.
Preguntado por si Asaja está satisfecha con estas medidas, Barato ha señalado: «Estamos satisfechos en el sentido de que hay explotaciones que han hecho un esfuerzo muy grande, fundamentalmente explotaciones importantes de las provincias de Cuenca y Ciudad Real, con un número de cabezas que se han sacrificado muy grande», aunque ha puntualizado: «Yo no sé si el tope de los 500.000 por explotación llegará a cubrir todas sus necesidades».
En este sentido, ha afirmado: «No quiero empezar a poner pegas, lo que quiero empezar es a poner soluciones y por lo tanto vamos a ver cómo queda esto», al tiempo que ha apuntado que en las conversaciones que se han mantenido con la Consejería se ha tratado de que la enfermedad no vaya a más.
EL GOBIERNO PONDRÁ UN MÁXIMO DE DOS MILLONES PARA LAS AYUDAS A ABONAR EN 2023 Y 2024 AL 50% CON LAS CCAA
Por su parte, el Ministerio de Agricultura ha señalado que la reposición de animales en las explotaciones supone un coste adicional para el ganadero en función del precio de mercado concreto de los animales. Por eso, para el pago de estas nuevas ayudas a la repoblación, el Gobierno transferirá a las comunidades autónomas un máximo de dos millones de euros entre los ejercicios de 2023 y 2024.
Estas ayudas complementarán las indemnizaciones por 5 millones de euros pagadas al 50 % entre el Estado y las comunidades autónomas por el sacrificio de animales.
El Gobierno ha considerado preciso establecer una línea de subvenciones estatal para compensar dicho coste adicional y asegurar, de este modo, la viabilidad de las explotaciones. Esta actividad ganadera genera importantes externalidades positivas, tales como el aseguramiento de unos niveles de renta equitativos entre los diferentes territorios y a fijación de la población en el medio rural.
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